Esta nevada histórica que nos ha dejado el paso de Filomena por Madrid y el norte de la península ibérica ha causado estragos en el arbolado urbano y en nuestros jardines. Muchos árboles se han visto afectados por el temporal, siendo inevitable la caída de sus ramas o el desplome total del árbol. Pero si algo nos ha recordado la tormenta es la importancia de podar. Precisamente estos meses que tenemos por delante es la temporada idónea para realizar una efectiva poda de invierno.
¿Por qué realizar la poda en invierno?
- La caída de las hojas deja al descubierto la estructura de las ramas, facilitando así la poda del árbol.
- Las podas de invierno debilitan menos, sobre todo a aquellos árboles y arbustos de hoja caduca, ya que no se eliminan las hojas.
- En invierno la diseminación de ciertos hongos que pueden aprovechar las heridas de los cortes para infectar están más inactivos.
Recordamos que hablar de poda es hablar de la salud del árbol y consiste en eliminar parte de una planta de forma selectiva con el objetivo de eliminar las partes muertas y que así crezcan con mayor fuerza, como explicamos en un post anterior en el que se habló sobre las podas de otoño, necesarias para la preparación del invierno. Y es que podar no es solo cortar sin más, se debe atender a los períodos de crecimiento de cada planta, en qué época salen sus hojas y cuándo tiene lugar su floración. Mientras que las podas de otoño son meramente podas de limpieza, eliminación de ramas secas y puro mantenimiento del ejemplar, las podas de invierno suponen el saneamiento total del árbol.
La mejor época para realizar la poda es durante el invierno, preferiblemente en los meses finales de esta estación, cuando el frío es menos intenso. Es decir, el mes de febrero y principios de marzo, puesto que la temporada invernal tiene fecha de fin el 21 de marzo. El mes por excelencia es febrero ya que la primavera está cerca y las heridas del árbol cicatrizarán con mayor rapidez, sobre todo es la época adecuada para la poda de floración de arbustos y plantas trepadoras, la poda de árboles ornamentales, los árboles frutales, y rosales, así como para cortar el follaje seco de las gramíneas. Eso sí, los árboles y arbustos que florecen al inicio de la primavera no se deben podar en invierno, sino esperar a que florezcan y hacerlo justo después para no cargarnos la floración de ese año.
En Branco Bajalica S.L.U nos encargamos de cuidar todos los detalles con gran atención, ya que puede marcar la diferencia entre una buena poda o una poda excelente. Tanto si es una poda en altura como si no, no dudes en contactar con nosotros sin compromiso. Nuestros clientes y nuestros años de experiencia nos avalan.